La boda de Ana & Carlos fue una de las afectadas por la covid-19, estaba prevista en 2020 y en Menorca, su isla de veraneo. Sin embargo, la pandemia tenía otro plan preparado para ellos. Wedding Planner Barcelona.
Tras varios cambios de fechas y localizaciones (también se planteó la opción de celebrarlo en la casa de los padres de verano en Gerona), la boda tuvo lugar en una masía preciosa muy cerca de la Ciudad Condal.
El padrino fue a entregarle el ramo a la novia y se llevó el piano para cantarle una canción que le había compuesto, fue un momento muy enternecedor. Se dejó entrever el gran vínculo que tienen la novia y el hermano del novio.
En realidad estaban casados legalmente desde hacía un año, ya que tenían tramitado el expediente con Registro Civil. Dado que no pudieron hacer la boda cómo ellos querían, firmaron en Menorca junto a los más cercanos en 2020 y dejaron la celebración para más adelante, cuando las restricciones lo permitieran.
La ceremonia la oficiaron dos amigos de los novios, fue divertida pero también muy emotiva. Fueron saliendo varios amigos a dedicarles sus mejores deseos y contar anécdotas de lo más entretenidas para los invitados.
Se celebró bajo un árbol milenario y al lado del lago, bancos de madera con helechos marcando el camino hacia el “altar”. Las grandes protagonistas fueron las plantas aromáticas y las buganvillas rosas, para aportar el toque de color. En un chester se dijeron “Si, quiero”.
La pareja tiene una unión muy especial con Menorca. Es la isla donde veranean cada año, la isla que les ha visto crecer como pareja. Ya que no se celebraba la boda allí, querían que estuviera presente de algún modo.
Se nos ocurrió hacer el Seating Plan con la isla de Menorca y los nombres de las mesas eran pueblos y lugares especiales para ellos de la isla.
Cómo podréis comprobar en las fotos, los paleta de colores de la boda eran el rosa palo, azul verdoso y beige. Este color está presente en las servilletas (combinadas en esos tonos) y en las macetas de las plantas aromáticas en distintos tamaños.
Un aperitivo muy completo con 4 buffets y un grupo de música en directo amenizó la velada y, dio inicio a lo que sería una gran fiesta.
El plato principal fue Dorada encebollada. La guinda del pastel, nunca mejor dicho, fue un delicioso Carrot Cake (os confieso que es mi preferido, aunque soy amante del chocolate). Una decoración minimal, llena de velitas y colores suaves.
Ana & Carlos llevan mucho tiempo juntos y querían que la boda fuera una tremenda fiesta, y lo lograron!! Montamos un photocall con guirnaldas de colores brillantes y llamativos.
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